La víctima no puede quedar indefensa y vulnerable, la víctima no está sola: nos debe tener a toda la sociedad y el agresor está solo y en algunos casos cuenta con unos testigos pasivos que silencian cobardías y acosos y con su familia, que puede ser que le apoye erróneamente, en lugar de ayudarle hacia conductas menos antisociales y que favorezcan su futuro como persona digna.
Instituciones, Escuelas e Institutos, padres y familia, creemos que están tratando de atender una situación tan difícil como el bullying en todas sus formas, pero creemos que es necesaria una eficacia mayor. Hay víctimas sufriéndolo y hay que impedirlo mejorando la intervención de forma urgente.
No referenciamos estadísticas: un solo caso ya nos sitúa en la necesidad de ser más eficaces ante este problema.
Prevención e intervención que eviten el acoso escolar a la víctima, y también una actuación recuperativa y de reincorporación social del agresor.